→ Sinopsis:
→ Reseña: El cuarto libro de la saga de los Dark Hunters nos trae la historia de Zarek, uno de los Cazadores Oscuros más temido de todos. La historia comienza justo en el punto en el que, en el anterior libro, Zarek parte a su destierro en Alaska tras haber matado tanto a Daimons como a humanos con el fin de proteger a Sunshine de sus agresores. Artemisa está cansada de que este Cazador Oscuro siempre esté dando la nota por lo que pretende ponerle fin a su existencia. Sin embargo, Aquerón intercederá por él y apelará a que tenga un juicio justo. Para ello acude a Astrid una ninfa de la justicia, para que trate el caso y proceda si tiene que ser eliminado o no. Lo que no se imaginan es que Astrid conocerá al Cazador Oscuro poco a poco y descubrirá que debajo de esa dura apariencia se encuentra un hombre solitario que no ha sufrido más que penurias a lo largo de la existencia.
Me fascina esta saga. Todavía no he encontrado ningún libro con el que me haya aburrido y es debido a que cada Cazador Oscuro es tan diferente uno de otro que siempre hay algo que te engancha. En este libro conoceremos a uno de los más temibles, Zarek, él ha vivido más que desgracias tanto en su vida como ya convertido en Cazador Oscuro. Siempre repudiado, no conoce el cariño, ni el amor, nada más que la amargura y la soledad. Por ello es un ser tan hosco y arisco, a penas si se relaciona nunca con nadie y le cuesta ser agradable con los demás. He disfrutado mucho con la historia que nos ha ayudado a conocer el porqué de esa alma tan atormentada. Astrid, junto a Aquerón, son de los pocos que le darán un voto de confianza y no se dejará influir por las apariencias. Intentará conocerlo poco a poco y comprender el por qué de su comportamiento. Y, a medida que le vaya conociendo y se vaya abriendo a ella, surgirá entre ellos algo más.
También conoceremos nuevos Cazadores Oscuros: Jess más conocido como Sundown, un cazador caracterizado como vaquero, el único amigo de Zarek; Sira, la primera mujer Cazadora Oscura, muy rápida y con mucha destreza con el arco y la flecha. Además de un personaje diferente, Tánatos, un Cazador de la luz, creado por Artemisa con la única misión de poner fin a la vida de los Cazadores Oscuros. Ha sido un personaje realmente espeluznante y temible. Tiene los mismos poderes de los Cazadores Oscuros pero con la ventaja de que no le afecta la luz del sol. Además que tiene el poder de imponerse ante los Daimons y los Apolitas poniéndolos de su lado para crear un ejército.
El ritmo de la lectura es muy rápido. Hay mucha acción y muchas batallas entre Daimons y Cazadores Oscuros, descritas de manera magistral que te ayuda a imaginártelas fácilmente. Es aconsejable leerlos por orden ya que en esta parte conoceremos más datos a cerca de los Cazadores Oscuros y sus puntos débiles.
A medida que voy leyendo esta saga más detesto a Artemisa. No deja tranquilo a Aquerón, tratándolo como a un esclavo sexual. Los Cazadores Oscuros no son santo de su devoción y le pone la zancadilla siempre que tiene oportunidad. Ya quiero llegar al libro de Aquerón para poder comprender el por qué hace lo que hace, por qué se deja manipular tanto por la Diosa, me gustaría que Zimi la asara a la barbacoa algún día…
→ Reseña: El cuarto libro de la saga de los Dark Hunters nos trae la historia de Zarek, uno de los Cazadores Oscuros más temido de todos. La historia comienza justo en el punto en el que, en el anterior libro, Zarek parte a su destierro en Alaska tras haber matado tanto a Daimons como a humanos con el fin de proteger a Sunshine de sus agresores. Artemisa está cansada de que este Cazador Oscuro siempre esté dando la nota por lo que pretende ponerle fin a su existencia. Sin embargo, Aquerón intercederá por él y apelará a que tenga un juicio justo. Para ello acude a Astrid una ninfa de la justicia, para que trate el caso y proceda si tiene que ser eliminado o no. Lo que no se imaginan es que Astrid conocerá al Cazador Oscuro poco a poco y descubrirá que debajo de esa dura apariencia se encuentra un hombre solitario que no ha sufrido más que penurias a lo largo de la existencia.
Me fascina esta saga. Todavía no he encontrado ningún libro con el que me haya aburrido y es debido a que cada Cazador Oscuro es tan diferente uno de otro que siempre hay algo que te engancha. En este libro conoceremos a uno de los más temibles, Zarek, él ha vivido más que desgracias tanto en su vida como ya convertido en Cazador Oscuro. Siempre repudiado, no conoce el cariño, ni el amor, nada más que la amargura y la soledad. Por ello es un ser tan hosco y arisco, a penas si se relaciona nunca con nadie y le cuesta ser agradable con los demás. He disfrutado mucho con la historia que nos ha ayudado a conocer el porqué de esa alma tan atormentada. Astrid, junto a Aquerón, son de los pocos que le darán un voto de confianza y no se dejará influir por las apariencias. Intentará conocerlo poco a poco y comprender el por qué de su comportamiento. Y, a medida que le vaya conociendo y se vaya abriendo a ella, surgirá entre ellos algo más.
También conoceremos nuevos Cazadores Oscuros: Jess más conocido como Sundown, un cazador caracterizado como vaquero, el único amigo de Zarek; Sira, la primera mujer Cazadora Oscura, muy rápida y con mucha destreza con el arco y la flecha. Además de un personaje diferente, Tánatos, un Cazador de la luz, creado por Artemisa con la única misión de poner fin a la vida de los Cazadores Oscuros. Ha sido un personaje realmente espeluznante y temible. Tiene los mismos poderes de los Cazadores Oscuros pero con la ventaja de que no le afecta la luz del sol. Además que tiene el poder de imponerse ante los Daimons y los Apolitas poniéndolos de su lado para crear un ejército.
El ritmo de la lectura es muy rápido. Hay mucha acción y muchas batallas entre Daimons y Cazadores Oscuros, descritas de manera magistral que te ayuda a imaginártelas fácilmente. Es aconsejable leerlos por orden ya que en esta parte conoceremos más datos a cerca de los Cazadores Oscuros y sus puntos débiles.
A medida que voy leyendo esta saga más detesto a Artemisa. No deja tranquilo a Aquerón, tratándolo como a un esclavo sexual. Los Cazadores Oscuros no son santo de su devoción y le pone la zancadilla siempre que tiene oportunidad. Ya quiero llegar al libro de Aquerón para poder comprender el por qué hace lo que hace, por qué se deja manipular tanto por la Diosa, me gustaría que Zimi la asara a la barbacoa algún día…
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